El almacenamiento a veces pensamos que es algo que siempre debemos tener en nuestra PC, que debe ser algo más tradicional que tengamos en CD´s, memorias o que simplemente tengamos en un formato físico, porque así nos parece que resulta más real, más como estamos acostumbrados.

Pero tomando en cuenta que incluso el formato que es físico puede deteriorarse, perderse o alterarse, nos conviene preguntarnos ¿realmente es lo tradicional más seguro que la nube?

Hoy ponemos cara a cara a estas dos formas de almacenamiento para que tomemos la mejor decisión al momento de resguardar nuestros archivos.

Como ya vamos más allá de la mitad del 2016, no podemos evitar sorprendernos de lo rápido que se va un año y prepararnos por ello sobre lo que viene para el 2017, y no es que queramos ser dramáticos sino que se ve cada vez que la tecnología en la nube va ganando más y más terreno, por lo que ser parte de ella para el próximo año es uno de esos buenos propósitos que no debemos dejar pasar o dejar para mañana porque podemos hacerlo hoy.

Con base en este buen propósito, por qué no considerar los beneficios que este puede tener para nosotros, porque la nube sin duda nos convence y seduce, pero conviene hacer la decisión de mudarnos a ella de forma consciente e informada en base a sus beneficios.

Las operaciones que llevamos a cabo dentro de las empresas, sean pocas o varias, siempre nos exigen tiempo que a veces parase irse volando o si nos ponemos más poéticos, parece que se escapa de entre nuestros dedos como agua.

Lo destacable es que podemos nosotros optimizar ese tiempo hoy en día gracias a tecnologías en la web y no aprovechar esas ventajas nos hará trabajar más para obtener los mismos resultados, cosa que no nos conviene en lo absoluto por lo que es preciso que nos hagamos a la tecnología cuanto antes para optimizar nuestros procesos de trabajo.

Los recibos son papeleo, pero eso sí, no es cualquier papeleo sino el que da fe de que se ha recibido, valga la redundancia, un pago.

En caso de los recibos de honorarios, el pago es a nuestro favor o expedido por nosotros, por actividades o servicios, mismos que debemos justificar o declarar como impuesto o que nos ayudan a llevar una mejor contabilidad en nuestra empresa o como marca.

Un pago de honorarios también nos es útil para presentar una evidencia de que hemos recibido un pago o lo hemos hecho, por lo que es una forma de certeza por los servicios que prestamos. Ahora, si requerimos de hacerlos o prestarlos, nos conviene saber cuáles son los elementos que deben formarlos, cómo debemos cumplir con los requisitos necesarios y básicos para un recibo y estos son.